Viviendas con bajo impacto ambiental en Corrientes


Un equipo del Instituto de Viviendas de Corrientes realiza investigaciones para generar hábitat sin dejar de lado cuestiones ecológicas. Arquitectos desarrollan estudios sobre las energías renovables y los recursos de la provincia, contemplando las normas ecológicas internacionales. Las investigaciones buscan maximizar la utilización de materiales de bajo impacto ambiental.

Investigadores del Centro Experimental de Tecnologías Apropiadas (Ceta) trabajan de acuerdo a programas nacionales que engloban las principales cuestiones a tener en cuenta sobre el impacto ambiental. Así, un equipo del Instituto de Viviendas de Corrientes realiza investigaciones sobre materiales de construcción de acuerdo a la región. Además, está llevando adelante un proyecto en Colonia Carolina.
El arquitecto que está al frente del grupo de profesionales, Francisco Luciano, explicó que, a partir de estudios internacionales hace varias décadas, se abrió el camino a comisiones que elaboran informes acerca de la sustentabilidad, teniendo en cuenta el menor impacto negativo en la ecología. Mediante estos estudios se crearon en el país comisiones nacionales que llegan a las provincias para la construcción de viviendas según el ambiente de la región.
El cambio climático y el calentamiento global fueron señalados por el arquitecto como los asuntos que más afectan a las regiones. El profesional explicó que si bien toman en cuenta cuestiones a escala planetaria, se hace hincapié en las necesidades de cada región, como el programa municipal de recolección de plásticos.

“En el Invico se realizan actividades de la construcción teniendo en cuenta el impacto ambiental, la generación, traslado y proceso de materiales de construcción y a partir de estas consideraciones se genera el hábitat”, explicó el arquitecto Luciano.
Uno de los temas que desarrollaron quienes conforman este equipo, fueron investigaciones sobre materiales apropiados y el uso bajo o nulo de tecnologías que impacten de forma negativa al ambiente. Además, en zonas rurales de la provincia priorizan el uso de recursos locales desde el punto de vista ecológico.
Algunos de los elementos que nombró el arquitecto fueron la caña y la paja colorada como techo. También se trabajan ciertas técnicas de combinación de materiales como el embarrado. Respecto a esto último, dijo que “lo que falta es pasar por la etapa de racionalización científica para darle valor”.
“Cuando se utiliza la tecnología que no es propia de la zona se aleja de la sustentabilidad, por ejemplo el ladrillo cerámico no se fabrica en la provincia, sí el común; ocurre lo mismo con las chapas y de esta manera no se está haciendo uso adecuado de los recursos de la provincia”, indicó el arquitecto.
Por otra parte, contó que en Colonia Carolina se están construyendo 15 viviendas dispersas, donde se tuvieron en cuenta los estados bioclimáticos para la reconstrucción de las casas.

También trabajan en ensayos sobre materiales de techos verdes para las edificaciones en las ciudades. Estos proyectos están dirigidos a mejorar la calidad de vida de las personas, proporcionando techos que puedan dar un clima más adecuado a la vivienda. Por otra parte, indicó que el aluminio con el que están hechas las chapas consume más energía.
Otro de los trabajos que realizaron junto con la Facultad de Ciencias Exactas fue sobre la energía renovable. Además de estudiar el comportamiento técnico de una casa de madera de bosques cultivados, siempre contemplando las normas que reúnen los requisitos para una arquitectura sustentable

Fuente

www.Servicio Informativo de la Construccion